
Un breve homenaje escrito a José Antonio Suárez de Puga, escritor y poeta, cronista de la ciudad de Guadalajara, una referencia cultural de Guadalajara, en los días de sus homenajes.
Artículos y comentarios sobre Guadalajara
Desde hace poco más de un año, nuestro paisano Juan Pablo Mañueco está desarrollando una tarea literaria y editorial fuera de las comunes normas. Porque en ese espacio de tiempo, aproximadamente de un año, ha dado a luz nada menos que nueve libros (uno de ellos doble, por lo que en realidad serían diez), lo cual le pone a la cabeza de todos los records habidos y por haber. Libros densos, cuajados de ideas, de visiones y poemas, de historias y evocaciones guadalajareñas, castellanas, hispánicas… En días en que suelen repasarse los aconteceres del año, y destacar acontecimientos de relieve que tuvieron al 2015 por protagonista, creo que es muy justo señalar la figura de Juan Pablo Mañueco, y su obra literaria, como uno de los referentes de trabajo, dedicación y esfuerzo por una tarea autoimpuesta: la de escribir, relatar y entretener. Un nombre que se perfila idóneo para optar a ese cúmulo de opciones que el nuevo callejero reclama. Porque si de nombres propios se llenaran los rótulos de las calles, los pensadores y escritores debería optar a los mejores puestos. Los políticos honrados también, y los profesores, y los científicos, y los deportistas… y en esas aparece nuestro autor, que sigue escribiendo, y preparando, según él nos cuenta. Entre esos libros que ha publicado, yo destaco siempre los dedicados a Guadalajara, plenamente identificados con el ser de la ciudad y su tierra en torno. “Guadalajara, te doy mi palabra”, breve y exquisito. “Viaje por Guadalajara”, en el que se entremezcla la poesía con una novela de a pie, un día entero andando y descubriendo la ciudad, con toques mágicos y sugerentes. O al final ese “Donde el Mundo se llama Guadalajara” que es monumental, completo, absorbente … En un encuentro breve, sentados ambos al calor del sol del mediodía otoñal, frente a San Ginés, le hago unas preguntas que Mañueco responde contenido, porque se le nota que aún diría más, a cada tema, y lo diría con palabras ciertas y meditadas. Tras estos diez libros en un año ¿en qué trabajas ahora? ¿Quizás una nueva novela? Sí, está terminada ya, y en estos días ha llegdoa a las librerías. Es la primera novela de una trilogía titulada “La conversión del papa Francisco”. La inicial se llama “La Ciudad de Dios”, y relata el cónclave de 2013, en que resultó electo Jorge Mario Bergoglio. El título general, “La conversión […]
Acaba de ofrecernos un nuevo libro, de poemas esta vez, antológico y capital, el escritor alcarreño Francisco Vaquerizo Moreno. Aunque no quiere presentaciones ni voces sincopadas, yo no me resisto a decir que ese libro se ha hecho, como expresión honda de un escritor que nunca ceja, y así nos deja ese titular que aparece junto a la imagen de un hombre andando entre hierbas y amapolas: “De mis pasos en la tierra”. Tenía Cervantes dos visiones distintas de la poesía. Como dedicación enervante y enfermiza casi. O como paso seguro a los más altos límites del ser humano. La opinión de Cervantes andaba pues entre lo esperpéntico y lo sublime. Hizo decir a la sobrina de don Quijote que «hacerse poeta era una enfermedad incurable y pegadiza» y en La Gitanilla, sin embargo, proclama que «la poesía es una joya preciosísima … una bellísima doncella, casta, honesta, discreta, aguda, retirada y que se contiene en los límites de la discreción más alta». En esa ambigüedad puede situarse el nuevo libro poético de Francisco Vaquerizo, aunque todo cuanto en él se lee está destinado a subir la apreciación de los lectores por el mundo que les rodea, por el milagro de vivir, por la alegría de descubrir gentes, lugares, sentimientos… Nos llega, por tanto, una nueva entrega, en este caso poética, del acervo literario de un autor provincial que lleva ya contabilizados más de 35 títulos en su haber. Tras varios tomos de relatos, novelas y teatro, ahora nos alcanza con su gran antología, una especie de recuperación de toda su obra poética no publicada todavía, de esa que andaba desperdigada, solamente recitada, guardada en las estanterías –a veces arcanas- del ordenador… y Francisco Vaquerizo se ha arremangado, una vez más, y ha dado de sí cuanto puede, que es mucho, y nos ofrece este grandioso poemario, en el que sin duda vemos cómo da la talla de escritor de primera. El libro, editado sobre papel ahuesado, se distribuye en seis grandes capítulos que ofrecen poemas relacionados entre sí. La primera de las aportaciones son los “Poemas Religiosos” en los que Vaquerizo se muestra devoto absoluto de la Virgen, en las diversas advocaciones provinciales, y de algún que otro Cristo, pasando con su jugoso escribir sobre escenarios sacros y acontecimientos píos. El segundo capítulo lo titula “Versos del Quijote” y son reflexiones sobre personajes, anécdotas y capítulos de la primera novela del mundo. […]
Nos encontramos a Juan Pablo Mañueco en el lugar más probable. El juego de la probabilidad es infalible con este escritor alcarreño. Está en la calle. Sube la Mayor o baja el Amparo, pero Juan Pablo Mañueco, tras haber pasado unas horas en su despacho, escribiendo, sale a la calle: la vive y la respira. Por eso escribe tan cercano a ella, sabiendo de lo que habla. En tan solo seis meses, ha publicado seis libros. Unos de poesía, otros de prosa. Todos nutridos de un sustancioso bagaje intelectual e informativo, con el que Mañueco camina y dispensa palabras que sirven para aprender, disfrutar, soñar incluso. De esos libros, conviene repasar sus títulos, y quizás, preguntándole a él, sus contenidos. Porque la tarea de un escritor es –primero de todo- hablar consigo mismo, entenderse de verdad con ese extraño ser que cada uno llevamos dentro. Y luego, repartir a los demás esas palabras, esos conceptos y esas medidas palabras que llevan sonido y mensaje. Los libros que Mañueco ha publicado en los pasados meses, todos a través de la editorial Aache de Guadalajara, son estos: «Guadalajara, te doy mi palabra» (versos en torno a Guadalajara y sus gentes, con el palacio del Infantado en la portada); dos tomos de la obra «Castilla, este canto es tu canto», en los que analiza con profundidad y rigor la evolución histórica y literaria de nuestra nación, Castilla, a través de autores, personajes, batallas y ciudades; aunque en un solo tomo, el «Viaje por Guadalajara /¿Dónde estáis los que solíais?» es un libro doble, son dos libros: en uno aparece la novela de un día de verano, un viajero que recorre la ciudad, de arriba abajo, encontrando monumentos, gentes, intervenciones afortunadas, y desastres sin cuento. Y el otro, entremezclado entre los capítulos de la novela, es un largo poema que constituye la glosa vital del personaje, aludiendo a las mil cosas que un poeta alude normalmente, la vida, la muerte, el recuerdo, la nostalgia… finalmente, en diciembre apareció el sexto volumen de Mañueco, dedicado íntegramente a la poesía, los “Cuarenta sonetos populares y cinco canciones diversas”, en el que la diversidad nos envuelve con temas tan sorprendentes como el canto certero a los Encierros de Guadalajara, la alegría por la décima copa de Europa conseguida este verano por el Real Madrid, una serie de sonetos de amor encendido y brillante, o la desgranada elegía […]