Muchas arquitecturas, y muy modernas
La semana pasada, en la Sala “El Tragaluz” de nuestro gran teatro auditorio “Buero Vallejo” se habló de arquitectura, de formas y espacios, de proyectos y consecuciones: se pasaron imágenes de edificios, plazas, ámbitos y conjuntos. Se propusieron metas. Y se presentó un libro: 2000-2010 Arquitecturas diversas, que firma Javier Solano con sus textos y sus selecciones de lo mejor que el estudio de nuestra ciudad “Solano & Catalan” ha realizado a lo largo de la última década.
Una oportunidad esta, sin duda, para recapitular sobre algo tan denostado y maravilloso a un tiempo como ha sido la última, la ultramoderna arquitectura, en nuestra ciudad y aledaños.
Casas donde vivir
Ha sido la ciudad de Guadalajara una de las poblaciones que más ha crecido, porcentualmente, en número de habitantes, de todas las capitales de provincia españolas. Ello ha requerido la construcción, en la última década, de numerosas viviendas que, al final, a pesar de que se echaron los cálculos con todo cuidado, han resultado excesivas.
De todas las que se han construido, algunas han tenido un especial cuidado en su factura y estética, tanto en planta como en el desarrollo de sus superficies externas. Y uno de los arquitectos que más cuidado ha puesto en que esas casas fueran algo más que lugares para vivir, ha sido Javier Solano, que a través de su Estudio (Solano&Catalán) y con la colaboración de un nutrido y bien preparado plantel de profesionales, ha dado vida a un selecto repertorio de viviendas que en ese libro que comento se presentan.
Llaman la atención, quizás porque sean las últimas, aún no entregadas pero ya hechas, las “Viviendas Sociales” que Solano ha diseñado en el Parque Residencial del fuerte de San Francisco. Sobre una superficie de chapa ondulada se repiten metódicamente repartidas las ventanas orladas de colores vibrantes y diversos. Con una planta de articulación severa y útil, al desarrollo sencillo de la pared externa le da vida el color.
En esa línea, pero más elaboradas, están las viviendas que escoltan la Avenida de Francia, con sus colores variados en fachada, y las originales soluciones de los extremos de los edificios, en los que el autor se esmera por ser más visibles desde las rotondas.
Similares a ellas, pero con mayor visibilidad por estar en la plaza de Santo Domingo, son las que sustituyeron a viejas edificaciones clásicas, y que Solano integra en una ciudad que surge moderna sin renunciar a las esencias permanentes.
Y populares por sociales, pero destacadas en cuanto a volúmenes y solución de fachadas y entornos, son las viviendas en dos grandes bloques del barrio de la Estación frente a la Chopera.
Definí en el momento de su presentación, a la arquitectura del Estudio Solano&Catalan como sencilla, limpia y honrada. Quizás porque es un trabajo de preparación de la construcción en el que no hay excesos, no sobra nada, predomina la claridad y el espectador, o el usuario más intensamente, perciben que no se ha querido jugar con ellos, que se ha ido a cumplir los objetivos de hacer viviendas (o instituciones, o empresas) pero con unos detalles de belleza casi inapreciables, no dichas, que aumentan su calidad.
Edificios públicos
En el boom de la sociedad del bienestar, que parece haber tocado techo por ahora (porque la historia anda en curvas, nunca en rectas y menos aún en logaritmos) los últimos años han visto aparecer edificios destinados a la asistencias de la población en sus diversas facetas de protecicón social. Tanto centros de salud, como colegios, bibliotecas, auditorios, residencias para mayores, etc.,y en ese mundo ha entrado ampliamente el estudio de Solano&Catalán, construyendo en Guadalajara algunos emblemáticos edificios que cumplen sus objetivos con el detalle de su originalidad estructural y resolutiva.
Así destaco la Residencia para Mayores que no ha mucho ha iniciado su andadura en la zona nueva norte, en el Remate de las Cañas. Sobre una parcela de compleja distribución, y aprovechando el edificio para usos terciarios, con un supermercado y una Residencia para Mayores, Javier Solano y su equipo construyen un edificio original, útil, práctico y bello, algo que merece la pena ir a ver, y que en el libro que comento está publicado su sustrato en planos y sus imágenes desde todos los ángulos, que los tiene, y muchos, porque la construcción tiene forma de biombo circular, y su revestimiento de plancha de acero, ladrillo y hormigón de color.
Un Centro Polideportivo ofrece la publicación como exposición de esta faceta social: es el destinado a completar la dotación del Colegio Público “Río Tajo” en el polígono Residencial “Balconcillo” de nuestra ciudad, y en el que destacan , como siempre y sobre todo, las soluciones en plano que dan vida plena a la construcción, que la hace útil y certera. Y añade detalles (si se quiere banales pero siempre hermosos) de decoración mínima que acentúa volúmenes y usos.
Las empresas también respiran
En la sociedad productiva en la que vivimos, las empresas levantan sus edificios para dar servicio o a veces para marcar con sus perfiles bellos la preponderancia que desean tener en el mercado. Solano ha recibido encargos de empresas, que ha resuelto de modo muy diverso, pero con soluciones siempre brillantes y atinadas.
Un ejemplo de ello pueden ser dos espacios o alzados (ambas cosas son sustanciales en la arquitectura) que dan a Guadalajara un perfil y un latido nuevo. De una parte, el conjunto de minicines incluido en el Centro Comercial “Ferial Plaza”, y que muy poca gente ha apreciado todavía el gran valor estético y resolutivo que esta construcción, inmersa en otra, ha tenido. En el libro “Arquitectura Diversas”, las páginas 102 a 107 nos muestran con unas fotografías sorprendentes el valor de este entorno que normalmente está oscuro cuando vamos a ver cine, y que no se entiende si no se miran con detenimiento y placer los planos. Pero haciendo eso, mirando las fotografías y observando la resolución en plano del conjunto, se da cuenta uno que el bloque de minicines (el único ahora en funcionamiento en Guadalajara) que tenemos es una verdadera preciosidad, algo que eleva el termómetro de la moderna alcarreña.
El otro grande y reciente monumento que Solano ha añadido a la ciudad, aunque al otro lado de la Carretera Nacional, es el edificio para Sede Social de Caja Guadalajara, una pieza magistral, que en su día tuve la suerte de contemplar acompañado del autor, que me explicó detalle a detalle lo que allí se ha hecho. Con una economía de medios asombrosa, sin gastar ni un euro más de lo necesario, se consigue una funcionalidad extrema. Y además se erige un edificio que sin duda marca un hito en la historia arquitectónica de la ciudad, tanto en su fachada a la población, cuajada de cristales y parasoles que la dinamizan acentuando su sentido de bloque sin dimensión, como su fachada posterior, la que da al Clavín, que con una chapa de acero recortada en huecos de irregular distribución consigue un equilibro a base de mezclar dos fórmulas diferentes.
A partir de ahí, Solano ha diseñado otros dos grandes edificios para oficinas y negocios que van a ir (cuando los tiempos lo permitan, económicamente hablando) en las parcelas que aún permanecen vacías del otro lado de la Autovía, entre el edificio de Hercesa (que fue el primero de los diseñados por este Estudio y que preside la actual plaza de Europa con sus juegos de cristales y sombras) y el Ferial Plaza. Llamados Píxel y Giga, serán la expresión máxima de este grupo de profesionales, capitaneados por Javier Solano, que en estos inicios del siglo XXI están haciendo una arquitectura puntera, aplaudida tanto aquí (aquí menos, porque nadie es profeta en su tierra) y en el resto de España, y aún de Europa.
Mirar, si no, el conjunto residencial creado por este estudio para la capital de Rumanía. Sirve de cubierta al libro un aspecto de la fachada de uno de los numerosos bloques de viviendas “de alta densidad” que allí se crean, en las que prima la fuerza de las texturas de los revestimientos, los volúmenes volados de las terrazas y los tonos cromáticos de los paramentos exteriores.
Espacios público también
La faceta constructiva está hoy, al menos en el estudio de Solano y Catalán, complementada por la creadora de espacios. De ese tipo de actuaciones, es ejemplo la que se consiguió en el centro de nuestra ciudad, para rematar a nivel de superficie de calle el aparcamiento para residentes de la plaza de José de Creeft. Se ha conseguido un espacio abierto, cambiante, lleno de planos y sombras, de accesos, jardines y rondas, de tal modo que los habitantes de la zona tienen un enorme espacio para disfrutar, y al tiempo la ciudad queda embellecida con un espacio que se disfruta más que se ve.
Apunte final
Un libro de imágenes y sorpresas
Para los que son aficionados a leer, a tener libros de Guadalajara, a saber de las cosas que hay, que ha habido y que habrá en nuestra ciudad, este de “2000-2010 Arquitectura diversas” de Solano y Catalán es un libro fundamental. No solamente bello, sino útil en información y sorpresas. En tamaño cuadrado, de 24 x 24 cms, impreso a todo color en sus 168 páginas, por su interior corren tras el prólogo del catedrático de proyectos de la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid, Alberto Campo Baeza, veinte obras capitales ubicadas la mayoría de ellas en Guadalajara (algunas en Alcalá, Madrid, Aravaca y Bucarest) y algunas otras “virtuales” que están ahora mismo en el horno de la creación y serán realidad en unos años. Cuenta con el patrocinio del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha en su demarcación de Guadalajara. Su precio es de 25 Euros, y está ya a la venta en las librerías de la capital y en Internet en la librería virtual de Aache.