Libros en su día
Aprovechando que hoy se celebra el Día del Libro, voy a hablar de ellos. Porque los libros son como esos habitantes del planeta que, aunque sólo viven cuando se les mira, están en todas partes y llenan todas las rendijas. Doy con estas líneas mi bienvenida al Día del Libro, aunque personalmente lo pasaré en Granada, y más concretamente en Fuente Vaqueros, donde haremos la presentación de un libro que se ha editado recientemente, y en el que junto a otros escritores e ilustradores de Guadalajara, se habla del Quijote y se le representa en mil formas: es ese «El Quijote entre todos» del que creo haber dicho algo ya. Un libro hermoso, una pieza a desear por los cervantistas y sobre todo por los quijotistas. En la Casa Natal de García Lorca, hoy viernes 23 de abril se oirá una vez más la voz de Cervantes, el perorar de don Alonso Quijano, los rasgueos de las plumas de los escritores alcarreños…
Nuevos libros de Guadalajara
La tierra de Guadalajara es siempre actualidad en los libros. En estos días últimos han aparecido algunos interesantes ejemplares. El primero de ellos, una nueva guía de Sigüenza, primorosamente editada por Celeste y Rayuela. Escrita por el profesor de la Universidad madrileña, don Francisco Javier Davara, se titula «Guía Histórica Ilustrada de Sigüenza» y a lo largo de 80 páginas repletas de fotografías en color, más el plano de la ciudad y otro de la catedral, le presenta al viajero la esencia de esta Ciudad Mitrada, que da para tantos libros.
Con el Doncel en la portada salió hace poco otra publicación interesante. La ha escrito el que fuera canónigo seguntino don Gregorio Sánchez Doncel, y lleva por título «Biblioteca Alcarreña». Es un listado bibliográfico de libros referentes a Guadalajara o escritos por sus autores, y en este folleto de 30 páginas vienen todos los temas que empiezan por la letra A.
De Sigüenza, ya que estamos en ella, otro libro reciente: el escrito por Marcos Nieto y titulado «Las Sinagogas de Sigüenza», editado por su propio autor, y que viene a ser un monumental estudio de investigación sobre tema tan sugerente y siempre de actualidad, la presencia de los judíos en nuestra tierra. Precisamente una ciudad como Sigüenza, raíz del catolicismo y la jerarquía eclesiástica, se ofrece como un espacio en el que la fe hebraica y su cultura más pura estuvo anclada durante largos siglos. Un ejemplo de tolerancia y, el libro, una apasionante visión de una Sigüenza inédita.
Más Sigüenza. El canónigo y archivero de su catedral, don Felipe-Gil Peces y Rata, acaba de dar a la pública consideración un sencillo y curioso libro que titula «Escarceos en el Archivo Histórico-diocesano de Sigüenza». A lo largo de las 112 páginas de esta obra, editada también por su propio autor, aparecen las referencias que en el Diccionario decimonónico de Pascual Madoz se hacen de 47 pueblos de nuestra provincia. Además, en cada uno de ellos, aparecen algunas frases que el canónigo ha encontrado en los libros parroquiales de estos pueblos, frases que hacen alusión a la muerte, a las postrimerías, al acabóse: una curiosa colección de frases latinas y castellanas en las que los curas de tiempos pasados, y sus feligreses, querían dar fe de su honda raíz cristiana.
Cerca de Sigüenza está Jadraque. Henares abajo. Sede antagónica y alternativa de su episcopado, pues en ocasiones se refugiaron allí los obispos que, por llevarse mal con el cabildo, por no estar de acuerdo con la ciudad, o por otras razones, se «exiliaban» allí, bajo la sombra alargada de su Castillo del Cid. Pues bien: sobre Jadraque acaba de aparecer un libro que bien puede calificarse de definitivo. Es la Historia de la villa, la descripción de su patrimonio artístico, la relación de sus personajes, la descripción de sus fiestas… todo lo que puede y debe saberse sobre Jadraque lo cuenta don Andrés Pérez Arribas en su obra, recién aparecida, «Historia de Jadraque y su tierra». Editada por AACHE, se presentó el sábado santo en la villa mendocina, y el éxito de ventas dicen que fue tanto que casi se acaba la edición ese mismo día.
Sobre los pueblos alcarreños hay otra cosa que no debe olvidarse. Aunque quedó muy reducida en su distribución al ámbito propio del pueblo de que trata, nos ha llegado recientemente a las manos una primorosa obra suscrita por José Antonio Calvo Torija, y titulada «Galápagos, un lugar en la cañada». Es un ejemplo de cómo se debe hacer un libro local: pulcro, con buen papel, con seleccionadas imágenes, con tipografía limpia, elegante y corregida. En definitiva, un libro bello, encuadernado en tela. Pero además un libro útil, porque en sus páginas viene toda la historia del lugar (también la de Alcolea del Torote, ese enclave moro y cristiano que tuvo la llave del río preserrano en siglos viejos), la descripción de sus edificios singulares (iglesia renacentista, palacio barroco, ermitas…) y la referencia completa a su costumbrismo.
Si no libros, sí breves y enjundiosos artículos nos entrega estos días José Ramón López de los Mozos, el incansable investigador del folclore y las esencias humanas de la tierra alcarreña. Publicados en la «Revista de Folklore» de Valladolid, uno de los temas es el de las «Sirenas y «Corazones de la vida» en el arte pastoril», con referencias a algunas piezas alcarreñas existentes en el Museo del Pueblo Español, que muestran hermosos ejemplos del arte popular. El otro tema es un trabajado acopio de nombres, toponimias y advocativos sobre la virgen en Guadalajara, puesto bajo el título de «Hagionimia de Guadalajara: repertorio mariano». Un listado y un análisis de lo que los nombres de cosas y lugares dedicados a la Virgen significan en la tierra de Alcarria.
Libros para Centroamérica
Hasta el domingo día 25 estará puesto en la plaza de Santo Domingo de nuestra ciudad un gran contenedor de RENFE y una caseta informativa que la Junta de Comunidades ha querido montar para recoger libros con destino a Centroamérica. Es una forma más, quizás barata para nosotros, pero seguro que llena de espíritu fraternal, hacia los pueblos centroamericanos que lo perdieron todo cuando el huracán Mitch pasó azotándolos hasta las entrañas. Entregar tus libros ya leídos, o los que quieras comprar nuevos, y llevarlos a esa caseta, donde además hoy día 23 podrás coger el micrófono y hablar, contar o cantar cosas referentes a los libros y a Centroamérica, será una forma estupenda de demostrar su solidaridad con las gentes que tienen menos que tú.
Un Día del Libro, este de 1999, que viene por tanto cargado de intensas emociones, de muchos títulos nuevos, de largas horas esperando a ser vividas sobre las amigables páginas de los libros alcarreñistas.