En la Academia Nacional de Medicina, con Sanz Serrulla
Hace ya bastantes años me presentaron a un joven que, estudiante de medicina, tenía por afición principal hacer dibujos, al carboncillo, de los rincones de su ciudad natal, que él admiraba y conocía bien. Con los años, ese joven alcanzó a terminar su carrera, a especializarse, a conseguir doctorados, y a escribir libros tras investigar…