Tendilla dibujada
Mañana sábado tendrá lugar un doble acontecimiento cultural en Tendilla. De una parte, la inauguración de su Biblioteca y Centro Internet. De otra, y porque esa es la mejor manera de inaugurar un centro de lectura y de cultura, la presentación de un libro, escrito y dibujado por auténticas primeras figuras del arte y la arquitectura, sobre Tendilla y su patrimonio monumental. Luis Cervera Miralles, arquitecto, y el alcalde de la villa, Luis Lorenzo, oficiarán la puesta de larga de una publicación que dará a Tendilla un nuevo empujón en su imagen de lugar ideal y digno de ser visitado.
La Calle Mayor, principal objetivo
El viajero que quiere conocer la Alcarria tiene cientos de posibilidades a donde dirigir sus pasos. De entrada, una Pastrana ducal llena de encanto, ciudad grandiosa y llena de ecos renacentistas y barrocos. A la mitad, una subida hasta Valfermoso de Tajuña para ver desde el mirador de su altura la gloria de horizontes inacabables de ese valle pulcro y vario. Pero, antes de terminar, siempre, hay que llegarse a Tendilla, y entrar por el único sitio que se puede, por su calle mayor.
Se venga desde el sur, desde Guadalajara, se venga desde el norte, desde la Salceda y Sacedón, siempre se encuentra el viajero el largo filo de su calle. Tendilla es algo más que sus soportales, más que su Feria de San Matías, más que sus bizcochos borrachos de canela. Tendilla tiene una oferta gastronómica y cultura, monumental y costumbrista, que se hace obligada su visita en cualquier planteamiento viajero por la Alcarria.
A la Calle Mayor soportalada de Tendilla le ha hecho un retrato de papel y lápiz uno de los más considerados estudiosos, académico de Bellas Artes por más señas, que ha tenido España en el siglo XX. Luis Cervera Vera, que recorrió el pais entero dibujando, midiendo y estudiando sus viejos y espléndidos edificios, recaló al final de su vida (murió en 1998) por este país nuestro de Alcarria: dibujó casas, ayuntamientos, escudos y escalinatas. Se enamoró de nuestras plazas y las sacó planos y perspectivas a las mejores.
Pero, después de andar todos los caminos y otear pueblos y plazales, se quedó en Tendilla, pasando muchas jornadas en su calle mayor, midiendo, haciendo fotos, anotando detalles, para luego en el silencio de su estudio ponerlo en limpio, dibujar, levantar planos completos, alzar perspectivas íntegras y conseguir completar una Tendilla Dibujada entera y verdadera.
Soportales y palacios
En Tendilla es la Calle Mayor el eje primero de su vida urbana: un alargado muestrario de casas, de edificios públicos y privados, y de paseos soportalados, que surgieron además en un momento concreto de su evolución, a mediados del siglo XVI, confiriéndola a partir de entonces su definitiva y actual estampa.
Ya en ese siglo estaban tan satisfechos los vecinos de Tendilla de la prestancia de su pueblo, que en el largo informe enviado al rey Felipe II en 1580 (al que comúnmente se llama «Relaciones Topográficas») decían de sus calles y soportales: …Quiero adbertir una curiosidad que tubieron los fundadores que en la plaza y en las demás calles de la villa hicieron unos Salidizos y portales, que aunque llueba se puede andar la maior parte de la villa sin varros, limpieza que no se halla en pueblos de su manera… tiene muy buena plaza, y calles anchas de buena traza…
Esa descripción sigue valiendo hoy. Cuidada y tranquila, su perspectiva es magnífica desde cualquier ángulo que se la mire. Añado una fotografía reciente en la que aparece casi completo su frente sur, el que mira al sur, quiero decir, el que está iluminado, ahora en invierno, por el sol del mediodía. Pero el del norte es igual. Casi un kilómetro de soportales en cada lado, interrumpidos a medio camino por el anchuroso plazal de la iglesia y otro más estrecho algo más adelante, el que se abre ante el Ayuntamiento.
En el libro de Cervera Vera, vemos como en mágica secuencia el completo sucederse de edificios y soportales, en dibujos lineales a plumilla. El aspecto, entonces, es nuevo: casas y casas, con sus pies de piedra y sus ojos persianeros, sus tejados y alturas diversas, en una uniformidad inconformista, que da sensación de coro y barandilla. Una maravilla de dibujos, que luego se ofrecen en detalle, edificio por edificio.
Palacios y fuentes
En Tendilla hay otros elementos que Cervera mira y dibuja. Por haber estado tanto tiempo ante sus siluetas esbeltas y acabadas, nos da ahora la imagen medida de su palacio barroco, el de los López Cogolludo, de los que pone también escudo. Como los pone de otros caballeros e hidalgos antiguos, de inquisidores y mecenas. La ermita de la Soledad está plasmada en plantas, secciones, alzados y cubiertas. La fuente de los Mendoza, o “fuente vieja”, puesta desde hace siglos donde se cruzan dos arroyos y donde surge manantial inagotable de aguas, es otro de esos elementos que idealiza y retrata Cervera.
No se olvida de las ruinas, algo alejadas del núcleo urbano, pero que conforman también con su ajado monumentalismo la historia de la villa alcarreña: de una parte los muros inexpresivos del monasterio jerónimo de Santa Ana; de otra, el plano del antiguo castillo, que algunos, ya muy viejos, alcanzaron a ver antes de que se derribara para levantar el monumento al Sagrado Corazón de Jesús con el que el Cardenal Segura quería sacralizar a la diócesis entera; y en fin, y aunque en término propiamente dicho de Peñalver, las ruinas del monasterio franciscano de La Salceda.
La iglesia del pueblo es también analizada por Cervera, con plano, y el alzado de fachadas, torre y portadas. Lo mismo que hace con algunas casas señoriales, el Ayuntamiento y otros espacios que vienen a darle al visitante (y al lector y degustador de este libro que mañana se presenta) una descripción visual de este pueblo que se resiste a desaparecer. Aunque haya sido desviada la carretera de su entorno y eje vital, Tendilla sigue poniendo su voz en esta hora de turismo interior y de ofertas monumentales y ancestrales genuinas. Este libro, esta “Tendilla Dibujada” que nos ofrecen los Cervera con su genial pluma, es una prueba más de esa voz que puja por mantenerse alta y clara.
Hay que volver a Tendilla, y recorrerla con este libro, este TENDILLA de Cervera Vera /Cervera Miralles, en la mano, abriendo sus páginas, mirando sus piedras…
Apunte Bibliográfico
Un libro lleno de dibujos
El libro que se presenta mañana en Tendilla, y cuyos autores son Luis Cervera Vera (+) y Luis Cervera Miralles, tiene 96 páginas, en tamaño grande de folio entero y está impreso a dos tintas, una de ellas el granate oscuro, lo cual le confiere, sobre el tono pajizo del papel, un aire de libro de arte y una distinción de categoría.
Además de unos prólogos de Cervera Miralles, García de Paz y J. A. Yeves, ofrece amplia información textual sobre la historia de la villa, de sus señores los sucesivos Mendoza, y breves descripciones de sus monumentos.
El plato fuerte son los dibujos, pues se ofrecen todos, absolutamente todos, los edificios notables de la villa, con meticulosidad reproducidos. Tiene un precio de 15 Euros, y ya está disponible en todas las librerías.