Feria en Tendilla

viernes, 20 febrero 2004 0 Por Herrera Casado

Tendilla es uno de los mejores ejemplos de conjunto urbano tradicional en todo el ámbito de la región castellano-manchega. La Alcarria tiene en Tendilla uno de sus símbolos más destacados. Que ahora se torna actualidad con la próxima celebración de su anual Feria de San Matías.

Va a ser Tendilla, el próximo fin de semana, la corte de la alegría y la evocación. Si siguen las cosas como hasta ahora va el invierno, suponemos que lucirá el sol, se calmará el viento, y no hará frío. Eso llevará a miles de personas hasta la villa alcarreña. El sábado 28, a la media tarde, seguro que no se podrá dar un paso. Y así nos posaremos en esta Alcarria eterna de la animación y el espectáculo: en la Feria de San Matías de Tendilla.

La calle Mayor, un hervidero

Si algún monumento tiene Tendilla que la haga ser recordada por todos cuantos la visitan, este es sin duda la larga Calle Mayor que hace de principal arteria de comunicación y donde se centra la vida, la animación, y hasta donde se condensa, como en mágico conjuro, la historia toda del alcarreño burgo. Gracias a ella, Tendilla es, sin duda, uno de los mejores ejemplos de conjunto urbano tradicional en todo el ámbito de la región castellano-alcarreña. Y ello no lo debe al acúmulo de monumentos trascendentes en su aspecto individual, ni a la situación determinante del conjunto, ni siquiera al hecho de contar con una historia de dimensiones más o menos atractivas. Este título lo posee por juntar, a lo largo de toda una calle, que es su Calle Mayor, el eje primero de su vida urbana, un alargado muestrario de casas, de edificios públicos y privados, y de paseos soportalados, que surgieron además en un momento concreto de su evolución, a mediados del siglo XVI, confiriéndola a partir de entonces su definitiva y actual estampa.

Ya en ese siglo estaban tan satisfechos los vecinos de Tendilla de la prestancia de su pueblo, que en el largo informe enviado al rey Felipe II en 1580 (al que comúnmente se llama «Relaciones Topográficas») decían de sus calles y soportales: …Quiero adbertir una curiosidad que tubieron los fundadores que en la plaza y en las demás calles de la villa hicieron unos Salidizos y portales, que aunque llueba se puede andar la maior parte de la villa sin varros, limpieza que no se halla en pueblos de su manera… tiene muy buena plaza, y calles anchas de buena traza…

Monumentos a admirar en Tendilla

En la Calle Mayor de Tendilla se encuentran sucesivos todos los elementos que le dan la categoría de conjunto urbano de gran relieve. Desaparecidos ya el convento de los jerónimos que había sido primor del Renacimiento; el monasterio de la reforma francisca de La Salceda, con su opulenta sucesión de edificaciones y obras de arte; el castillo valentón de su altura; las murallas y puertas de su entorno, y aun el palacio condal, hoy queda, a lo largo de un kilómetro de asombro, la sucesión de edificios que en su gran mayoría son viviendas particulares, y que se caracterizan por estar construidas, de forma sencilla, conforme a los cánones de la arquitectura popular alcarreña, esto es, planta baja de sillarejo y alta o altas de adobes sobre entramados de madera, todo ello enfoscado de yesos de diversos tonos. En su fachada principal, el portal da a los soportales que recorren el pueblo, y la planta principal muestra balcones. Por atrás, tienen patios y cuadras.

Ese amplio muestrario de construcciones populares sumadas unas junto a otras, con variedad larga de pilastras, de aleros y de soluciones en las bocacalles, es lo que confiere a Tendilla su carácter único. Sabemos que el gran arquitecto e historiador del arte, Luis Cervera Vera, dejó casi acabado un magnífico estudio de esta Calle Mayor de Tendilla. En unos cuantos dibujos de su reciente libro póstumo “Plazas Mayores en las comarcas guadalajareñas”, Cervera nos da unos apuntes emocionantes de esta Calle, de sus edificios más representativos, de su “aire” único. Tendría el Ayuntamiento de Tendilla que animarse a editar ese estudio: sería una forma espléndida y certera de seguir promocionando a la villa que todos queremos.

También en el informe enviado al Rey a finales del siglo XVI (de carácter fundamentalmente fiscal, aunque descriptivo y realista de la situación contemporánea) se expresaba la satisfacción de contar aquí y allá con casas de muy buen aspecto, especialmente las que ornaban la ancha Calle Mayor …En la dicha villa hay mui buenos edificios de casas; son fabricadas de yeso y madera, y algunas de piedra y cal; hay pocas de tapería de tierra… de esto es el sumptuoso Edificio de las Casas, en las quales hay aposentos, y salas muy preciadas con mui buenas portadas, y ventanage de obra Romana y curiosas molduras en mui buenas maderas de nogal y pino… 

El palacio de Tendilla

En esta calle mayor aparecen también edificaciones singulares. Y entre ellas cabe mencionar el palacio y oratorio adjunto de los Solano, que es una obra barroca sencilla pero muy digna, de la primera mitad del siglo XVIII, con fachada de líneas anguladas, escudo nobiliario en lo alto, y sillar bien tallado, que presenta un portón de almohadillados sillares y el cimero escudo de la familia. Junto al palacio está la capilla u oratorio de la Sagrada Familia, de nave única, también con fachada a la calle, ocupando todo ello, con sus enormes jardines posteriores, toda una manzana del pueblo.

Otro edificio singular es la iglesia, inacabada conforme al plan inicial de mediado el siglo XVI. De ella solo quedan terminadas la cabecera y parte de la nave, así como los arranques de muros y pilastras de los pies del templo. De ese primer impulso constructivo es el ábside de robustos paramentos, de contrafuertes moldurados y ventanales con dobles arcos de medio punto. La portada, más moderna, es obra de comienzos del siglo XVII. Solamente tiene terminada, y ello en el siglo XVIII, una de las dos torres proyectadas, que se debe al arquitecto Bradi, según nos demostró el estudioso tendillano profesor García de Paz.

* La Feria de Tendilla en el siglo XVI

En el siglo XVI venían a Tendilla mercaderes y compradores de remotos lugares. Por San Matías, a finales de febrero, y durante 15 días, se juntaba en sus soportales un variopinto mundo de comerciantes de especias y sedas, de muebles y libros, de magos y brujas. Los compradores se extasiaban al ver tanta maravilla de lejanos países llegada.

Algo de ello nos deja recordar este texto de las Relaciones Topográficas: de Aragon vienen Cordellates mui finos; de la Rioja, Torrecilla de los Cameros, vienen muchos paños, y así mismo destas Comarcas y pueblos de Alcarria, y Ynfantazgo, de la Ciudad de Huete y su tierra, Marque­sado de Villena y Mancha vienen muchas suertes de pa­ños: así mismo vienen muchas tiendas de paños subi­dos, granas, paños estrangeros, sedas, terciopelos ra­sos y damascos que traen mercaderes gruesos de Tole­do, Madrid, Alca]á, Medina del Campo y otras partes; para todos estos paños vienen infinidad de mercaderes de todo el Reino y fuera dél, para las quales Mercade­rías hay asignadas partes donde se pone lo de Cuenca, Toledo, Segovia, con los demás géneros de paños por buena órden: pónense mui principales tiendas de sedas, joyerías, mercería, que traen mercaderes gruesos que venden á otros de menos cantidad; están juntas estas tiendas que parescen un Alcaicería de Granada que pa­resce estar toda la vida de asiento: hay otras tiendas de Mercadería de Flandes, lienzos y otras cosas preciadas: vienen muchos vizcainos con lienzos preciados, y Mer­caderías extrangeras: vienen muchos Portugueses, traen muchas suertes de lienzos, y hillo de mucho valor; traen mucha especería, añir, brasil y otras muchas cosas curio­sas y preciadas, como es drogas y conservas de la Yndia: en ninguna feria de España se hallegan tantos portugue­ses: ponense mui grandes tiendas y aparadores de pla­teros: viene mucha cera, pescados de todos géneros, por ser principio de Quaresma: vendense muchas Cabalgaduras…

La Fuente de los Mendoza

En Tendilla, si tienes sed, puedes acudir a varias fuentes. Al estar en lo hondo de un valle, surgen manantiales por sus laderas, y y en la villa se canalizan y exhiben las saludables aguas por fuentes y manaderos.

De todas las fuentes de Tendilla, es la más antigua y señorial la que lleva tallado en su frente el escudo de los Mendoza. Señal de que la mandó construir y entregar al uso de las gentes su señor, en el siglo XV, don Iñigo López de Mendoza, conde de Tendilla.

Dice de ella el escritor Juan José Bermejo, en su libro “Fuentes de Guadalajara”, que es esta la llamada  Fuente Vieja de sillar antiguo y desgastado, que luce en su frente un escudo de armas de los Mendoza, señores de la villa desde el siglo xv. Por sus dos caños vierte el agua a dos pilones semiesféricos, para más tarde dejarla caer sobre un amplio pilón rectangular.

A esta fuente la describía también, en el siglo XVI, Juan Fernández de Sebastián, de esta manera: tiene una fuente en la una calle que llaman calle Franca, de agua dulce, con quatro caños que salen de un pilar alto, es tan delgada que mandan dar a los enfermos asi en la villa como en la comarca, tanto que el Arzobispo de Toledo D. Pedro Gonzalez de Mendoza embiaba  a cargas por ella, y lo mismo han hecho los Sres. y hacen, cuia es y a sido la dicha villa, nasce en la sierra de San Gines mui cerca de la dicha villa en la cumbre de la sierra: sale por mui buenos mineros de guija, y no por salitres de frente del aire cierzo, es fuente muy continua, no mengua mas en Verano que en el Inbierno, no la impiden los tiempos, y aunque haya secas.

Un monumento más para poder admirar en este viaje a Tendilla que reomendamos, de cara al próximo fin de semana en la Feria de San Matías.