Un convento entre tomillos: el de Nuestra Señora de la Salceda
Al viajero que sube la cuesta desde Tendilla al alto de la Alcarria (tierras de Peñalver y Fuentelencina) no deja de sorprenderle la silueta, -medio fiera, medio angélica-, de unas ruinas que parecen cada vez más mimetizadas con el rebollar y el tomillo que las rodea. Se trata de los restos comidos por el…