Día: 3 de septiembre de 2010

Cañamares arriba

El viajero ha matado la tarde dándose un garbeo por el valle del Cañamares. Se ha arriesgado mucho, porque la tarde, de verano, estaba congestionada de luz, y sobre todo de calor, y algunas solanas costaba atravesarlas a cabeza descubierta. Pero la naturaleza, el mundo, ese valle solitario y perfecto del río Cañamares, entre Castilblanco…

Por Herrera Casado viernes, 3 septiembre 2010 0